Canal de Suez, de lo insólito a la realidad internacional

Recientemente llegó a la agenda pública mexicana un hecho que a todas luces parecía, si no insólito, por lo menos inédito. Ante el asombro de propios y extraños al sector logístico, el mundo fue testigo de cómo un buque de 200 mil toneladas y 400 metros de largo quedó atravesado en diagonal en la vía marítima artificial conocida como Canal de Suez. Ubicada en Egipto, tiene alrededor de 200 metros de ancho y 193 kilómetros de longitud para conectar al mar Mediterráneo con el Océano Índico, es decir los mercados de Europa con los asiáticos.
Aquellos que forman parte de la familia logística y del comercio internacional vieron cómo el nombre del Canal de Suez pasó de ser una vía comercial estratégica al protagonista de un hecho noticioso a nivel global que incluso plasmó las redes sociales con memes y chistes que llegaban a minimizar el impacto económico y global que ello implicaba.
Cabe recordar que cerca del 15% del tráfico marítimo mundial transita por el Canal de Suez, en números reales se cuenta una circulación anual de, al menos, 19 mil barcos, es decir, un promedio de 52 cargueros al día, según la Autoridad del Canal de Suez. Gracias a ello, esta vía marítima es una fuente de ingresos clave para Egipto.
La consecuencia fue que más de 400 embarcaciones con dimensiones similares a las del Ever Given se mantuvieron varadas por varios días, ya que se fueron acumulando entre el martes 23 y el lunes 29 de marzo. Algunos optaron por rodear el Cabo Esperanza, que pasa por Sudáfrica para acceder a Europa, con el fin de llegar a sus destinos con varios días de retraso. Otro hecho notable es que, entre los sectores más afectados, se ubicaron los energéticos, pues se encontraban en el sitio, tratando de atravesar, cargueros y tanqueros con gas natural y petróleo.
En cálculos emitidos por diversas fuentes relacionadas al intercambio comercial, se habla de que el bloqueo costó al canal entre 14 y 15 millones de dólares por día y tuvo un impacto notable que alteró la cadena mundial de suministros, misma que, como consecuencia, elevó el valor promedio del flete.
IMPLICACIONES EN MÉXICO
Si bien el bloqueo no representa una afectación directa para México, o al menos no una notable, pues nuestra ruta comercial con Asia, de donde provienen la mayoría de los insumos que llegan a nuestro país para la generación de productos, es a través del Océano Pacífico.
El punto de inflexión es que algunos de estos insumos son importados de Europa, y estos, a su vez, son adquiridos desde Asia; es en este eslabón de la cadena de suministro donde sí hay una afectación directa.
Otra de las afectaciones a menor escala es la de aquellos insumos que llegan por medio de la ruta del Cross Trade, es decir aquellos comodities, como especias o semillas y sus derivados, que salen de mercados como el de la India y pasan por Europa y para desembarcar finalmente en algún puerto del Golfo de México.
Es importante enfatizar que esta ruta ofrece ventajas, dadas las dimensiones y características navieras a gran escala, representa costos más accesibles para el importador mexicano y tiempos aceptables de traslado de mercancías.
Al menos en México, aún no son notables las afectaciones que se tendrán sobre el bloqueo del Canal de Suez, en el corto plazo, hasta la entrega de esta columna al cierre del mes de marzo. Pero estas se harán evidentes en las próximas semanas y podrían ser visibles en sectores productivos muy específicos, sobre todo en aquellos que dependen del intercambio comercial global, posiblemente se verán las implicaciones en los sectores automotriz, aeroespacial, metalmecánica, textil y de producción de electrónicos.
Aunque como consecuencia será posible que a corto y mediano plazo este retraso en materias primas pueda, a su vez, significar retrasos en bienes terminados en específico en autopartes, semiconductores u otros producidos en el país, hasta aumentos significativos en los precios de mercancías.
¿REPENSAR EL INTERCAMBIO COMERCIAL?
Tantos hechos, tantas implicaciones y tantas consecuencias reales y potenciales nos pusieron a reflexionar sobre algunos puntos clave acerca del intercambio comercial internacional que, si bien son una fuente que ha nutrido las cadenas de suministro globales, hoy se ponen en tela de juicio.
El paso natural de esto, fue hacernos pensar en las medidas necesarias para contrarrestar las posibles afectaciones que un hecho tan relevante e insólito puede tener en los mercados internacionales, tales como revalorizar el comercio regional sobre el global y, aunque pueda parecer un punto simplista, tiene su relevancia.
A raíz de las reglas establecidas en el T-MEC, mismas que proponen que para considerar el paso o aceptación de una pieza o producto a ser comercializado bajo este tratado comercial, la mayoría, o cierto porcentaje de sus piezas, deben provenir de la región. Esto, que pudo haber sido considerado desde diversos matices, ha tomado mayor validez en aras del impulso a las cadenas de suministro locales o regionales sobre las globales, por representar un menor riesgo ante eventualidades como las del Canal de Suez.
Este punto sin duda deberá ser revisado por las instancias internacionales competentes en la materia, siempre en beneficio del comercio internacional.
Escrito por Edmundo Montaño, director general de Drip Capital México

Fundada en 2015, en Palo Alto, California, Drip Capital es una empresa fintech especializada en financiamiento de empresas. A través de una plataforma tecnológica que simplifica el proceso de aprobar y financiar clientes, Drip Capital reduce los costos de financiamiento y minimiza los riesgos para las empresas que buscan vender sus productos de manera local e internacional. Drip Capital forma parte de la asociación global de empresas financieras Factors Chain International y del Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior, COMCE.