Logística

Sistemas automatizados de almacenamiento y transporte

Nos encontramos en una era de rápida expansión de la tecnología en muchos de los ámbitos de nuestro quehacer cotidiano. Los extraordinarios avances en materia de transmisión de datos, voz e imágenes, complementados con la localización satelital y el denominado internet de las cosas, están abriendo posibilidades que se antojan infinitas en los entornos sociales, económicos y en materia de distribución y seguridad física.

Por lo que respecta a la logística, en el presente siglo las herramientas tecnológicas que se han desarrollado abarcan tanto a los sistemas de información como a la portabilidad de datos, así como a la ubicación de vehículos y mercancías, agrupándose en un concepto denominado trazabilidad, que ya hemos abordado en esta misma columna.

En lo relativo a los diseños de planta e instalaciones de almacenamiento para la manufactura, la tendencia mundial ha sido hacia la integración de industrias relacionadas en los llamados clústeres, sitios donde es posible conjuntar en un área relativamente cercana, tanto a proveedores como a los ensambladores finales de productos y mercancías destinadas al consumo.

En estos complejos, se han aplicado innovaciones como la entrega justo a tiempo o “Just in Time” que si bien no es un concepto nuevo, si se ha refinado en aspectos como la entrega de los insumos, materiales y subconjuntos prácticamente en la línea de producción, trasladando los costos y actividades de manejo de inventario a los proveedores en las distintas etapas de la cadena de suministro.

De ahí que desde hace algunos años, hemos visto como las necesidades de espacio y de una manipulación eficiente de los SKU´s, (unidad de manejo de inventario) se han reflejado en el desarrollo de sistemas cada vez más autónomos tanto en las etapas de proveeduría como en las fases de distribución de mercancías, evolucionando hasta en lo que hoy se conoce como sistemas automatizados de almacenaje y recuperación conocidos por sus siglas en inglés como AS/RS (Automated Storage/Retrieval Systems).

Estos sistemas permiten la guarda, custodia, clasificación y almacenamiento de toda clase de artículos y productos, mediante dispositivos electrónicos, neumáticos y mecánicos que han dado nacimiento a una nueva disciplina conocida como Mecatrónica, la cual como una rama de la Ingeniería Industrial, se enfoca en el estudio, experimentación y desarrollo de conjuntos integrados para satisfacer las necesidades crecientes de la industria, de manera autónoma -sin la intervención de la mano de obra humana-, dando lugar a la denominada robótica.

Con ello, se han potenciado las funciones del almacenamiento y ensamble de todo tipo de artículos y mercancías, mejorando de manera sustantiva la calidad, fiabilidad y flexibilidad que se espera en este tipo de actividades. De ahí que se han creado dispositivos e instalaciones como: líneas dinámicas, túneles integrados de selección de órdenes y transelevadores múltiples, que permiten incrementar la eficiencia y la capacidad de respuesta, con reducción de costos de mano de obra, de operaciones, de consumo eléctrico (los sistemas pueden operar a obscuras) y de combustibles, (al evitar el uso de montacargas), elevando en conjunto, los niveles de servicio al cliente.

Para el buen desempeño de los sistemas referidos, se requiere de una adecuada planeación, diseño, manufactura e instalación de sus componentes, apoyados en el desarrollo de un software modular y moderno, capaz de resolver con eficacia los requerimientos de los distintos clientes a lo largo del proceso de manipulación de productos y materiales, además de tener la flexibilidad necesaria para responder a las condiciones cambiantes de los mercados. Los programas específicos así diseñados, son compatibles con los sistemas de gestión de almacenes utilizados actualmente en la industria y emplean interfaces tabulares amigables con los usuarios a través del uso de imágenes de objetos, en lugar de complicados lenguajes e instrucciones, con lo que se reduce también el tiempo de aprendizaje.

Cada sistema se hace como un traje a la medida dependiendo de factores como: la información del producto, el tamaño y peso de la carga, índice de velocidad y rendimiento, dimensiones y capacidad del almacén, requerimientos del picking (selección de SKU´s) así como las limitaciones de espacio. Cuentan con tecnologías que permiten una suave manipulación y una colocación precisa con exactitud de hasta 1 milímetro. También toman en cuenta el flujo de los materiales y si los artículos se integran a producción, a procesamiento o a distribución, así como los tipos de carga y rangos de temperatura deseados, dentro de una cadena de frío.

Son aplicables a almacenes de alta densidad, de gran altura y de profundidades dobles o sencillas. Para ello se utilizan transelevadores satélites u horquillas telescópicas, con dispositivos cambiables para rollos, tarimas, cubetas y cualquier tipo de presentación o embalaje, que permiten una maniobra ágil, segura y adecuada en el resguardo y recuperación de las mercancías. Los dispositivos mecatrónicos se apoyan en tecnologías como Pick-to-Light, Pick-to-Voice, Ethernet inalámbrico, o RFID, para una rápida y precisa identificación de cada uno de los SKU.

La tendencia hacia el futuro es que los sistemas automatizados, reduzcan la necesidad de grandes naves de almacenamiento con amplios pasillos para la circulación de montacargas, lo cual se traducirán en ahorros significativos en inversiones y en el uso de acero y concreto. Innovaciones recientes, permiten ahora el manejo de módulos de auto-almacenaje de hasta 8 toneladas de peso los cuales se manipulan como una unidad o pueden ser integrados en conjuntos acoplados de diversos módulos, formando trenes, los cuales pueden ser transportados de manera autónoma dentro de clústeres, intercambiando insumos, procesos y productos entre diversas industrias.

Lo anterior, combinado con el desarrollo de los vehículos de conducción autónoma los cuales son capaces de circular por vialidades urbanas e interurbanas sin intervención humana, utilizando sensores y las tecnologías de posicionamiento global, abren un campo fértil para una logística del futuro con un menor uso de mano de obra, lo cual es especialmente sensible en la actualidad, a la escasa disponibilidad de conductores de unidades pesadas de autotransporte.

 

Escrito por: Sergio García